4/04/2006

Con un montaje multimedia llega Eslovenia al FITC


Con un montaje de que va entre la libertad artística absoluta y el terror mente-que entumece en el vacío amnésico entre la realidad y la imaginación, un escritor sucumbe eventual a la voluntad de su creación. Mientras que la ficción llega a ser más fuerte que realidad, ella rinde su autoridad personal a la de los caracteres que ella ha traído en ser.
Un homicidio lésbico y una interacción con el bosque en imágenes, son lo que trae la compañía WaxFactory, en un montaje dónde la ilusión a través de imágenes diseñadas por artistas visuales y digitales, musicalizados por el grupo techno de Eslovenia “ Random Logic”, deja incongnitas en la mente de los asistentes, para que cada quien saque sus propias conclusiones. El trabajo multidisciplinario destruye lo más tarde posible cada ilusión de teatro en... ella DIJO en el momento de su creación con una secuencia sin aliento de arrestar las imágenes diseñadas por algunos de los artistas visuales y digitales más extraordinarios de Europa. Los espectadores vienen entender la historia evasiva según sus interpretaciones individuales de las ojeadas producidas en su decir, seducido por los ambientes mercurial del rodear-sonido creados por la lógica al azar del dúo renombrado del electronica y los funcionamientos calibrados de los agentes americanos Erika Latta y Dion Doulis y ejecutante esloveno Katarina Stegnar. Debajo del ronquido electrónico y de las mentiras agitadas de los pixeles el dolor del tiempo perdido y del deseo incumplido.

Comenzó el festival de Teatro….






En Caracas cuando comienza el Festival de Teatro es una fiesta en toda el área cultural. Para mi el festival comenzó el día domingo cuando me aventuro sin entrada al Aula Magna, para ver a Antonia San Juan (Todo sobre mi madre) con el montaje “Las que faltaban”. Un monólogo bien divertido, que cuando usas las técnicas “venezolanistas” del coleo, pues se hace más divertido porque no tienes que desembolsar dinero. Antonia San Juan impresionante como se desdobla de un personaje a otro, de los mejores monólogos que he visto en años (y eso que la cultura de esta técnica no las tiene metida Mimi, hasta en la Plaza Bolívar).
Luego de salir del recinto universitario y esperar que cayera la tarde nos trasladamos al paseo Los Próceres, para ver el montaje Il Corso, de Alemania, con el cuento de un hombre buscando la felicidad. Basada en el libro de las Preguntas de Pablo Neruda, nos hicieron pasar casi dos horas corriendo por todo el recinto, bajo una mínima luna.
¿Qué?, ¿Dónde?, ¿Cuándo?, ¿Por qué?, eran las preguntas que en perfecto castellano se hacían los actores de “Pan Otikum”, bien pintorreteados y con grandes carros rústicos paseando por todo el patio de Los Próceres. Preguntas sin respuesta que le hacían al público, para culminar en un gran grito de “fffoootttooo”.
“¿La rosa está desnuda o sólo tiene ese vestido?”, “¿a quién le pregunto la hora?”, “¿cuál es el pájaro amarillo que lleno el nido de limones?”; eran sólo algunas de las interrogantes que desembocaron en un gran despliegue de fuegos artificiales, aderezados de un hombre volando en un péndulo. Luego de esta muestra germánica, nos marchamos a la casa, felices porque comenzó la fiesta teatral.